Estrena EL MANICOMIO en cines
EL MANICOMIO (Heilstätten) llega al cine. En un santuario remoto y sombrío cerca de Berlín está el hospital militar de Beelitz-Heilstätten. Un grupo de YouTubers accede ilegalmente al siniestro bloque de cirugía. La idea es cumplir un desafío de 24 horas que esperan se vuelva viral. Aprenden demasiado pronto que no están solos y que no son bienvenidos.
El terror de la mano de YouTubers y experimentos nazis en un hospital abandonado en las afueras de Berlín.
Los Youtubers están equipados con dispositivos de visión nocturna para poder grabar sus aventuras en la oscuridad. Cuentan con una cámara que puede grabar y convertir la energía térmica en imágenes de luz visible. Estos adictos a la adrenalina también están persiguiendo rumores de actividad paranormal con la esperanza de registrar pruebas y descargar sus aventuras en las redes sociales.
El Hospital Militar de Beelitz-Heilstätten
En un recorrido por edificios olvidados que pueblan la geografía mundial, vamos de visita al país germano en una historia de abandono.
Se trata de un elegante edificio, en Potsdam (Alemania), cerca de Berlín. Construido en 1898 por los arquitectos Heino Schmieden y Julio Boethke. Fue abandonado hacia el año 2000.
Creado como un sanatorio para enfermos de tuberculosis, Beelitz-Heilstätten fue uno de los mayores complejos hospitalarios de Alemania. Tiene 60 edificios construidos en una zona de 200 hectáreas y está dividido en dos áreas, separadas por sexos. En su momento disfrutaba de plena autonomía energética.
Adolf Hitler fue atendido allí
Durante la Primera Guerra Mundial el hospital se militarizó para acoger a soldados y heridos del Ejército alemán. Entre los 17.500 pacientes que pasaron por allí se contó, del 9 de octubre al 4 de diciembre de 1916, un cabo nacido en Austria que había sido herido en la Batalla del Somme. 17 años más tarde se convertiría en dictador absoluto de Alemania: Adolf Hitler.
En la Segunda Guerra Mundial Beelitz-Heilstätten continuó sirviendo como hospital militar. Durante la Batalla de Berlín, al final de la contienda, 3.000 heridos fueron evacuados, junto al personal del hospital. El hospital cayó entonces en manos del Ejército Rojo, convirtiéndose en el mayor hospital soviético fuera de las fronteras de la URSS. Estuvo ocupado hasta el año 1995.
Tras la retirada soviética se hicieron varios intentos de privatizar el complejo, con escaso éxito. Algunos edificios fueron renovados y se adaptaron para diversos usos. Se creó una clínica de rehabilitación neurológica, otra de rehabilitación infantil, un centro de atención e investigación para los enfermos de Parkinson y un centro cultural. El resto del complejo se abandonó a su suerte y poco a poco empezó a convertirse en un lugar fantasmal.
Un asesino serial operando en la zona
En 1989 la zona se vio aterrorizada por varios crímenes necrofílicos. Fueron perpetrados por el asesino serial Wolfgang Schmidt, conocido como “La Bestia de Beelitz”.
En diciembre de 1990 recibió un nuevo huésped, el exdictador de la Alemania comunista Erich Honecker, aquejado de un cáncer de hígado. Empezó en Beelitz-Heilstätten su huída para evitar ser juzgado por sus crímenes tras la caída de su régimen. Desde el hospital él y su esposa Margot fueron trasladados a Moscú el 13 de marzo de 1991.
Su último uso fue como clínica privada especializada en problemas neurológicos, concretamente en el tratamiento del Parkinson.
El hospital y el cine
Tras su abandono, su bello estilo y la decadencia en la que degeneró hicieron que el hospital se convirtiese en el escenario ideal para películas.
Allí se rodaron, entre otras, varias escenas de El pianista de Roman Polański (2002), en la que Adrien Brody hace el papel de pianista polaco de origen judío Władysław Szpilman, y Valkyrie de Bryan Singer (2002), con Tom Cruise como el coronel alemán Claus von Stauffenberg, líder del fallido golpe de Estado contra Hitler el 20 de julio de 1944.
En la actualidad el hospital está en un avanzado estado de abandono y ha sufrido no pocos actos de vandalismo, lo que aleja cada vez más las posibilidades de que se recupere su antiguo esplendor.
Podés ver EL MANICOMIO en cines desde el 28 de febrero.